CARTA DE AMOR NO 2,
Como explique en mi blogger sobre esta publicación de cartas románticas las denomine extraviadas ,por que de alguna manera casual llegaron hasta mi persona. la historia de esta preciosa carta es la siguiente,Un hermano tenia una biblioteca inmensa, la mayoría de los libros los adquiría ya usados en su mayoría en Caracas en la Avda Urdaneta, país Venezuela, en este sitio debajo del puente existen diversos vendedores de libros con esas características, al morir mi hermano y revisarlos todos para darle un destino, encontré esta escrita a maquina en tres folios, tamaño carta, deduzco que venia inserto en el libro cuando lo vendieron, espero la disfruten por el amor que expresa ella,
Caracas. 8. 10. 1979
Mi amor.,
Hasta ayer todo fue hermoso
o parecía hermoso,
tantas horas compartidas, tantas brisas
respiradas juntos, tantas noches
saboreados por tus labios en mi boca,
tantas palabras dichas y no dichas,
porque a veces los silencios tenían voz y
los ojos se gritaban la ternura
tantos viajes infinitos a través del mundo
en una plaza. tantas lunas derretidas sobre tu pelo,y tantos planes...
por eso el olvido ,es un territorio
inaccesible para este amor, un lejano paraíso,
al que quizás algún día yo quisiera llegar,
pero se que nunca podre, por eso porque el mundo
palpitaba entre tus manos, a cada caricia, y las sombras se iluminaban al acercarte a mi......
Hasta ayer...
como paso, amor.. de repente no entiendo nada,
me vuelvo tonta , o loca, o niña desesperada,
o mujer sola,
o amante sin amado, o flor marchita,
o carta sin destino,
¡me vuelvo nada..
yo se que de amor nadie se muere, a lo sumo
uno se enferma,
se enferma quizás para siempre,
con una tristeza crónica para la cual no hay
vacunas ni antibióticos, quizás
algún analgésico que calme un rato la agonía,
pero luego todo vuelve a empezar,
y el dolor se hace mas fuerte que antes,
Pero ayer, cuando tus labios callaron un momento
quizás para saber de mi dolor,
pensé que no eras el mismo,
o que si, y que por un extraño juego del destino yo estaba en otra dimensión, en otro planeta absurdo y remoto, con leyes y lenguaje que no conocía,
esas manos que ahora seguramente
se estrujarían nerviosos, no eran las mismas manos
que alguna vez.....
Alguna vez tus manos despertaron mis poros,
me inyectaron el calor de un hombre
y la ternura de un amigo.
Al día siguiente de ese primer encuentro,
paseamos largamente por la ciudad
enternecida y silenciosa, hablando
con risas y palabras, construyendo un nuevo
idioma que ya no seria tuyo o mio
solamente, que ya comenzaba a ser nuestro,
inventando un código secreto, que luego
solo tu y yo comprenderíamos,
creando también otro lenguaje hecho
de contactos, de caricias temerosas,
y dedos enlazados..
Y recuerdo, recordé ayer en ese instante,
como tu brazo anudo mi cintura y cubrió mis hombros, como mi corazón empezó a latir lleno de palomas, alocada y felices,
por eso no entendí enseguida el sentido
de tu adiós, no podía entender que mi piel
se quedaría huérfana de tu piel,
que ya no estaría tu brazo para contener
mi cuerpo, que ya no estaría tu caricia
comprensiva para calmar mis momentos
de angustia y posarse como un bálsamo
sobre mi cabeza aturdida,
Ayer me lo dijiste, ayer comprendí
el significado de la palabra NUNCA
y borre de mi diccionario la palabra
SIEMPRE, mientras me hablabas,
yo trataba de imaginar tus ojos,
trataba de descubrir en ellos algún signo,
alguna clave, algo que me dijera que
las palabras que estabas pronunciando
no eran reales, que yo oía mal.
pero no podía ver tus ojos.
no me dejaste verlos y comprendí
que tal vez era cierto,
que ninguna mirada seria suficiente para
borrar el adiós que tu boca me clavaba
hubo un breve silencio, un instante en que,
como una moribunda, vi pasar frente a mi los
los siglos de amor , que una vez nos dimos,
un instante que era el tiempo todo,
que resumía la vida,
recordé el primer día,
lentamente las sombras se alargaban por la
acera y el día dejaba de ser dia
sin darnos cuenta, la oscuridad
crecía afuera y la luz adentro,
dentro de nosotros,
no se cuantas horas pasamos allí.
dejando que el tiempo nos fusionara
y que las palabras se tendieran
como puente entre los dos.
al salir pusiste tu mano en mi brazo,
y yo sentí que algo había ocurrido
por primera vez en mi vida...
- que dolor........
adiós
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